jueves, 14 de noviembre de 2013
miércoles, 13 de noviembre de 2013
Prevención de la diarrea en los bebés
Se
define a la diarrea como deposiciones
acuosas o líquidas de más de 200 g/d de heces al día. La diarrea ocasiona
grandes pérdidas de iones y electrolitos del cuerpo, eliminados a través de
estas deposiciones líquidas ya sea en pequeñas o grandes cantidades, llevando
al cuerpo a un gran decaimiento físico, malestar general, dolores abdominales,
somnolencia, desgaste físico, y otros síntomas que acompañan al cuadro. Si
estos malestares no son tratados a tiempo pueden ser muy peligrosos y con
consecuencias graves.
Las causas pueden ser
diversas; bacterianas, virales o de otra índole. Pero viendo en la práctica
médica y el contexto social en el que vivimos, en cuanto a la higiene y la
limpieza nos damos cuenta que el problema comienza en la forma de la
alimentación.
No digo que las madres
preparan los alimentos de manera inadecuada, sino que al momento de alimentarlo
obvian algunos aspectos esenciales de higiene. En una prueba realizada en
nuestro hospital, con 10 pacientes niños con sus respectivas mamás a las cuales
les pedimos que le den de lactar a sus hijos. Nos dimos cuenta que solo 2 de 10
mamás se limpió el pezón de su seno para dar de lactar a su hijo. El resto solo
se descubrió el seno y le dio de lactar sin previo aseo.
¿Le sorprende? En la mayoría de los casos, sin darse cuenta
y sin mala intención, son las mismas madres las que provocan este malestar a su
niño, en el afán de alimentarlo para saciar el hambre de su hijo por que se
encuentra llorando pidiendo alimento, y la prisa hace que se olviden de limpiar
el pezón.
El detalle está en que una
madre, en su multifacética forma de vida, por ejemplo, va en el micro de ida a
trabajar, de compras, de viaje o de visita, le da su pezón a su hijo para alimentarlo,
el niño al succionar está tomando su leche, pero a la vez está insalivando todo
alrededor del pezón, y aparte que algunas veces regurgita un poco de leche y eso queda alrededor del pezón. La madre una
vez cumplió con alimentarlo lo aparta y guarda el seno sin haberlo limpiado,
aparte que la madre comienza a traspirar por la calor, hace que todo eso que
esta alrededor del pezón se fermente y se comience a cultivar bacterias y demás
microorganismos infecciosos, que más adelante ingresaran al niño a través de su
boca cuando la madre le dé nuevamente de lactar sin haberse realizado un previo
aseo del pezón.
Es de esta forma como algunos
de los bebes que aun lactan llegan a la consulta por enfermedades como la
diarrea.
Por eso siempre recomiendo a
toda madre que ingresa a consultorio, el cuidado que debe tener en cuanto a la
higiene en la lactancia; en la posición correcta que debe tener un bebe que aun
lacta para una buena alimentación.
AT17
miércoles, 6 de noviembre de 2013
Complejo de Wendy
Basado en el cuento de
Peter Pan, se extrajeron varias enseñanzas con respecto a la relación de
pareja, en la cual la mujer se comporta como si fuera la mamá de su marido. En
el cuento aparecen dos personajes Wendy y Campanita. Estos dos
personajes totalmente diferentes y opuestos pueden con-vivir en el interior de
una mujer que tiene por marido a un hombre Peter Pan que en definitiva
es un hombre-niño.
Campanita, es una mujer
alegre, divertida y resplandeciente. Una mujer llena de energía como si fuera
un cascabel, siempre está sonando y divirtiendo, tiene metas, sueños, ganas de
vivir, de hacer cosas nuevas y buscar nuevos horizontes. Se caracteriza por ser
muy compañera del hombre. Es interesante ver que parece que Campanita surge en
la primera etapa del enamoramiento. Cuando la mujer se enamora aparece como una
persona rebosante, que se cuida, que se arregla, que quiere lograr metas en la
vida y quiere hacer cosas nuevas.
Wendy, se la define como madre de un hombre. Aparece como una mujer más reposada,
seria; más madura justamente porque ha asumido una actitud en la vida, la de
tener que cuidar de todo el mundo, de hacerse responsable de todos. En este
caso no solamente de los hijos sino del marido, ahora se transforma en la mamá
de su pareja.
Wendy, acepta cualquier trato con tal de
estar al lado de ese hombre, en este caso de Peter Pan; quien tratará de
confundirla con la fantasía de que va a llevarla a vivir a una tierra, la
Tierra del Nunca Jamás, donde se va a encontrar como en un paraíso. Que van a
estar juntos y de alguna manera le propone ser su pareja. Y Wendy cree esa
historia, cree que va a estar con él para siempre. Pero no sabe que cuando lleguen
a la tierra del nunca jamás, se va a encontrar con un montón de niños chiquitos
que no tienen quien los cuide.
Cuando Wendy empieza a cuidar a todos esos
chicos, que viven en un árbol, en una casita todo es muy dulce, muy lindo,
incluye a Peter Pan como un nene más. Esto es posible porque él tiene las
características de un niño.
El doctor Thomas Harris, en su libro Yo
estoy bien, tú estás bien, popularizó la idea de que parte de nosotros
mismos se comunican unas con otras. El identificó tres —padre, adulto e hijo—
y las llamó “estados del ego”. El padre le dice al hijo lo que tiene que hacer,
el hijo trata de ignorar al padre y de hacer lo que más le gusta, y el adulto
trata de controlar a todos a fin de que no se autodestruyan.
Amar y no hacer de madre es la vía
para dejar el complejo de Wendy. Parte de la solución al dilema de Wendy y
Peter Pan es darse cuenta de que no se está viviendo los roles correspondientes.
Después es necesario que cada cual asuma el papel que le corresponde: Dios ha
establecido al hombre como cabeza del hogar y no como el hijo de la esposa. La
mujer es ayuda del esposo y no su madre. En el momento en que ambos se apropien
de los roles que les corresponden, entonces la solución habrá llegado a dicho
matrimonio.
Dr. Dan Kiley
TT14
martes, 5 de noviembre de 2013
¿Todos sonríen igual en todo el mundo?
Aunque se pensaba que las
expresiones faciales que indican sentimientos como la alegría, tristeza o
enfado eran universales, un nuevo estudio publicado en Proceedings of the
National Academies of Science sugiere que, por el contrario, la cultura
influye mucho en lo que refleja nuestra cara.
El primer científico que planteó que las expresiones faciales significan
lo mismo en todo el mundo fue Charles Darwin. El naturalista identificó un
conjunto de seis emociones básicas: felicidad, sorpresa, miedo, repugnancia,
enfado y tristeza. Según su hipótesis, si los gestos de la cara que se
corresponden con dichos sentimientos se transmiten culturalmente de generación
en generación, sus significados deberían haber ido variando gradualmente de
forma que hoy en día, por ejemplo, una señal de alegría pudiera indicar
tristeza en otras culturas.
A través de su correspondencia con investigadores de todo el mundo,
Darwin llegó a la conclusión de que, al contrario de lo esperado, nuestros
ancestros tenían el mismo conjunto básico de emociones que se correspondían con
gestos faciales como parte de nuestra herencia genética. La sonrisa era un
rasgo biológico, no cultural.
Las emociones básicas no
son las mismas en todas las regiones
Sin embargo, el nuevo estudio de
la Universidad de Glasgow (Reino Unido) ha encontrado pruebas de lo contrario.
Los investigadores crearon rostros virtuales con 4.800 expresiones clasificadas
según las seis emociones básicas de Darwin. La mitad de las expresiones se
mostraban en caras de origen caucásico y la otra mitad en caras con rasgos del
este de Asia. Los participantes en el estudio, de origen tanto asiático
como caucásico, tuvieron que identificar las emociones en dichos rostros
virtuales. Si las seis emociones básicas de Darwin son universales, todos los
individuos deberían asociar las mismas caras con las mismas emociones.
Los resultados revelaron que, mientras que la sonrisa significaba lo
mismo para todos los participantes, las emociones que reflejaban sorpresa,
miedo, repugnancia y enfado no eran clasificadas con claridad por los
individuos de origen asiático. Los investigadores concluyen que cada cultura
tiene sus propias expresiones que no tienen que ser compartidas en otras
regiones. Para los originarios del este de Asia, por ejemplo, las expresiones
faciales podrían responder a otras emociones fundamentales como la vergüenza,
el orgullo o la culpa.
Además
de ciertos rasgos físicos o características emocionales que los padres heredan
a los hijos, también le transmiten ciertas formas de comportamiento, valores y
hábitos. Por eso es necesario tomar en cuenta de manera voluntaria lo que se
transmite a los hijos.
TT16
lunes, 4 de noviembre de 2013
El Sida se expande entre las amas de casa
La representante del UNFPA, Celia Taborga, explicó que, según datos del Programa Nacional de ITS y VIH/sida, la epidemia afecta cada vez más a las mujeres monógamas que se dedican a las labores domésticas en el país.
Taborga señaló que “Las mujeres casadas que son amas de casa se están infectando cada vez más con el VIH/sida, porque sus parejas no respetan el vínculo matrimonial”. La mayor concentración de esta epidemia se encuentra en Santa Cruz, Cochabamba y La Paz, con el 89 por ciento de los casos.
Destacó que si bien las mujeres actualmente acuden más a los centros hospitalarios para realizarse los controles del Papanicolau, lo que facilita la detección oportuna del VIH para su posterior tratamiento y evitar decesos, también deben dialogar con su pareja, a fin de evitar las complicaciones futuras.
“Si hay un mayor registro de mujeres infectadas, se debe a que las mujeres acudimos más a los hospitales, por eso se habla de la feminización de la epidemia”, replicó.
La especialista indicó que, según datos de 2010, por cada mujer con VIH existen dos hombres en igual condición. “Hay una concentración en los grupos de edad que representan a adolescentes y adultos jóvenes: seis de cada 10 personas con VIH tienen entre 15 y 34 años”.
Aseguró que en Bolivia cinco de cada 10.000 personas viven con el sida, ya que hasta junio del 2010 fallecieron 560 personas por el síndrome. “El solo hecho de que los datos pertenezcan a la gestión 2010 nos muestra cuán complicado es el tema del VIH”.
Sin duda que la fidelidad en el matrimonio es un garantía para la salud de la pareja, en este caso es un resguardo contra el contagio del VIH-SIDA. Si la pareja se mantiene fiel el uno con el otro no existirá el riesgo de contagiarse de tan desagradable enfermedad.
La Prensa
TT11
Taborga señaló que “Las mujeres casadas que son amas de casa se están infectando cada vez más con el VIH/sida, porque sus parejas no respetan el vínculo matrimonial”. La mayor concentración de esta epidemia se encuentra en Santa Cruz, Cochabamba y La Paz, con el 89 por ciento de los casos.
Destacó que si bien las mujeres actualmente acuden más a los centros hospitalarios para realizarse los controles del Papanicolau, lo que facilita la detección oportuna del VIH para su posterior tratamiento y evitar decesos, también deben dialogar con su pareja, a fin de evitar las complicaciones futuras.
“Si hay un mayor registro de mujeres infectadas, se debe a que las mujeres acudimos más a los hospitales, por eso se habla de la feminización de la epidemia”, replicó.
La especialista indicó que, según datos de 2010, por cada mujer con VIH existen dos hombres en igual condición. “Hay una concentración en los grupos de edad que representan a adolescentes y adultos jóvenes: seis de cada 10 personas con VIH tienen entre 15 y 34 años”.
Aseguró que en Bolivia cinco de cada 10.000 personas viven con el sida, ya que hasta junio del 2010 fallecieron 560 personas por el síndrome. “El solo hecho de que los datos pertenezcan a la gestión 2010 nos muestra cuán complicado es el tema del VIH”.
Sin duda que la fidelidad en el matrimonio es un garantía para la salud de la pareja, en este caso es un resguardo contra el contagio del VIH-SIDA. Si la pareja se mantiene fiel el uno con el otro no existirá el riesgo de contagiarse de tan desagradable enfermedad.
La Prensa
TT11
jueves, 31 de octubre de 2013
Menos y malformados espermatozoides
Según
indica la Agencia Materia, el esperma masculino está perdiendo y es
posible que ese deterioro sea una señal funesta. Un estudio realizado en
Francia durante 17 años, entre 1989 y 2005, muestra que la concentración de
espermatozoides en el semen bajó un 32,2%, a un ritmo de un 1,9% al año. Si en
1989 la concentración promedio era de 73,6 millones por centímetro cúbico, en
2005 había caído ya hasta los 49,9 millones. Esta última cifra, aunque aún está
dentro del rango en el que la Organización Mundial de la Salud considera
fértil a un hombre, está por debajo del mínimo; 55 millones por centímetro
cúbico a partir del cual se incrementa el tiempo necesario para concebir.
Los autores del artículo, que se publica en
la revista Human Reproduction, analizaron las eyaculaciones de 26.600
hombres, probablemente la mayor muestra estudiada en el mundo, y, aunque los
resultados no se pueden extrapolar a otros países, sus datos confirman la pauta
que se ha observado en otros lugares del planeta. Además, los espermatozoides
no solo eran menos sino que también había descendido el porcentaje, en un
33,4%, de los que estaban bien formados.
“Este estudio constituye una seria
advertencia sobre la salud pública y se tiene que buscar la relación entre este
descenso de la calidad del esperma y cambios medioambientales”, escriben los
autores en el estudio. En él, señalan como posibles culpables, entre otros
factores del entorno, a sustancias químicas que alteran el equilibrio
hormonal como el bisfenol A, que se encuentra en objetos de uso tan común
como las latas de conserva o las botellas de plástico. “Aunque el descenso
también podría estar relacionado con factores que han cambiado durante el
periodo en el que realizamos el estudio, como un incremento de la obesidad,
cambios en la alimentación o una vida más sedentaria”, reconoce Joëlle Le Moal,
investigadora del Instituto de Vigilancia Sanitaria y coautora del estudio.
Jaime Gosálvez, catedrático de
genética de la Universidad Autónoma de Madrid, considera que “es
evidente que la calidad seminal de las sociedades avanzadas está bajando”. “Eso
se ve día a día”, asegura. “En el banco de donantes, reclutar individuos que
tengan buena calidad seminal es un drama, incluso entre gente joven que debería
tener un semen de alta calidad. Hay clínicas que me confiesan que solo el 10%
de los que van a donar son aptos para hacerlo”, señala. “Curiosamente —añade—
en sitios menos desarrollados como
Brasil o México, donde se han realizado estos estudios, la calidad seminal no
ha bajado de manera exgerada”. El estudioso también considera que hay una
relación entre el deterioro de las condiciones medioambientales y el
empeoramiento de la calidad del semen. “Si hay una célula especialmente
sensible a las circunstancias nocivas del medio ambiente, esa es el
espermatozoide, porque si hay algo que le está estresando y le puede dañar, lo
que no quiere el espermatozoide es transmitir información defectuosa a la
descendencia, y prefiere morirse antes que transmitirlo”, explica.
Gosálvez recuerda que “se ha visto
que, en niños que han nacido con la ayuda de reproducción asistida o
fecundación natural, pero procedente de esperma defectuoso, pueden desarrollar
enfermedades asociadas a malos controles del sistema epigenético”. “Y hay trabajos
en ratones en los que tras dañar el espermatozoide para luego fecundar, se
observa que las ratoncitas abortan con más facilidad, las crías desarrollan
tumores y los nacidos vivos tienen más problemas en su desarrollo posterior”,
añade el investigador.
Todos
estos indicios hacen que los autores del estudio que hoy se publica en Human
Reproduction reclamen que se incremente el esfuerzo para averiguar qué está
provocando este alarmante descenso en la calidad del semen masculino,
particularmente en los países más avanzados. “Nuestra advertencia puede ayudar
a las autoridades sanitarias a reforzar sus políticas sobre los perturbadores
endocrinos (los productos químicos que alteran el equilibrio hormonal),
preferiblemente en el ámbito europeo, mejorando la investigación y los sistemas
de vigilancia”, reclama Le Moan.
Pese al descenso de la calidad del
semen, los investigadores descubrieron un dato positivo. La capacidad de
movimiento de los espermatozoides (la motilidad) se había incrementado, del
49,5% en 1989 al 53,6% en 2005. La naturaleza, y las urgencias que provoca el
deseo sexual son una muestra de ello, siempre busca la forma de abrirse paso,
hasta en las circunstancias más adversas.
Algo tan elemental para la
reproducción de la raza humana está en peligro. Y a todo esto, como individuos,
lo que podemos hacer para contrarrestar esta decadencia es corregir nuestros
hábitos de consumo, ya que la vida es el regalo más preciado que tenemos, y es
nuestro deber ayudar a su continuidad.
Etiquetas:
espermatozoide,
gen,
reproducción,
vida
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